Entré a eso de las 11, 11 y pico. Sin cola.
El gordo agrandado que me revisó casi hasta el calzoncillo, me sacó un cigarrillo de flores, lo cual me dio mucha pena. Casi le digo "me lo sacás para fumártelo vos, no hdp?"; pero por miedo a quedarme afuera, opté por la concordia.

Los precios del agua, el Speed y el gas-oil, altos como siempre. Ya es un tema que me tiene harto, pero también es cierto que me estoy acostumbrando. El warm me gustó mucho, especialmente al final. Creo que el tipo habrá pensado "yo voy a dejar la pista caliente y que no me jodan". Y así fue.

Gerber me gustó también. Un poco mal el sonido y no hablemos de los cortes. Supongo que es criticable para un profesional de ese nivel, pero las cosas pasan. Alguien acá comentó que tal vez le pidieron que no la "subiera" tanto y podría ser... Además solo tuvo dos horas. No me gustó que cuando se estaba despidiendo, con HC que lo aplaudía y lo felicitaba, la gente cantara "Hernaaaaaan... hernaaaaaaa oleeeeee..."; no solo desapruebo esos cantos en este ambiento, sino que además todavía más irrespetuosos me parecen cuando está saliendo del mainstream otro DJ. Qcyo. Capaz exagero.

El set de HC fue muy viajero y a la vez me dejó sin piernas. Será que me gusta mucho y no puedo criticarlo, jajaj.

Aunque ya sabemos lo del "ambiente", lo de las drogas y lo de los walking dead, no estoy de acuerdo con la apreciación de que es equiparable a un domingo en C1. Creo que ni se compara, más allá de ambos sean productos comerciales. El sábado encontré de todo, y de entre ese todo había gente copada que estaba disfrutando al máximo, no importa cómo.

Sí hubo pocas mujeres y bastantes empujones. Pero eso no es solo por el ambiente sino también por la habitual venta excesiva.

Mucho calor y una puesta en escena bastante decepcionante.

Finalmente, me llamó la atención la cantidad de flacos de "prevención", subidos a pequeños atriles, que estuvieron vigulando (?) toda la noche. Aplaudo los controles aunque dudo de su legitimidad.