AMADOR, Eddie
Una auténtica institución en la historia de la house music en el área de California. Más de veinte años de experiencia frente a las mejores cabinas de Los Angeles (la sala High Society a la cabeza), a lo largo de los cuales Amador ha sabido perfeccionar la exitosa fórmula de sus celebrados sets a base de deep house dubby y vocal. Eso, sin olvidar una más que férrea fama como remezclador y productor en constante ascenso, con el apoyo de labels del prestigio de Yoshitoshi (propiedad de Deep Dish).

AN DER BEAT
A David Nicolau, aparte del skateboards, el surf y su hija, le pierden especialmente dos cosas: el funk à la George Clinton, sucio y bizarro, y el house más sucio aún del de el sello Dancemania. Pues eso es An Der Beat: negritud, futurismo y sexo, no necesariamente en este orden. Dos álbumes para el sello Minifunk y una cara siempre sonriente le respaldan en su trono del house español, pero por si fuera poco también se esconde bajo los alias de Anti DJ, DJ Dab y unos cuantos más inconfesables.

ANGEL, Dave
Nacido en Clapham, al sur de Londres, en una familia humilde, Dave Angel heredó de su padre, un músico de jazz, la admiración por John Coltrane y Charlie Parker, lo cual dio origen a ese jazz electrónico mezclado con techno evocador que fue su seña de identidad. A la hora de pinchar, Angel combina la influencia del sonido Detroit con lo que él llama tech-funk: duro, pero con elegancia.

ARMANDO
Junto a DJ Pierre y Bam Bam, fue el gran patriarca del acid house. Hijo de un emigrante cubano, Armando Gallop nació en el Southside de Chicago en 1970, y a los diecisiete años ya creó su primer sello, Warehouse, junto a Mike Dunn. Autor del himno ácido ?Land Of Confusion?, en sus sets fundía hardhouse, underground y acid con soltura. Una leucemia acabó con su vida el 17 de diciembre de 1996. Descanse en paz.

ARMANI, Robert
Creador del mítico tema ?Circus Bells?, Armani es uno de los personajes de culto de la escena de Chicago. Es primo de Paul Johnson ?el housemaster que inició la moda del disco-houses?, y junto a él comenzó a los catorce años a desarrollar su peculiar estilo, minimalista y ácido, que también traslada a sesiones de ritmo implacable y contundente.

ASSAULT, DJ
Empezó trabajando en un McDonald?s hasta que decidió dedicarse de lleno al oficio de DJ. Y oficio es, precisamente, lo que tiene DJ Assault: artesano de la mezcla (velocidad infernal, sesenta discos por hora, platos manipulados, discos canallas), él es el portavoz oficial del ghetto-tek, el electro triple X de Detroit que versa sobre chulos, putas, culos y tetas. Sus sesiones son una exhibición de técnica que roza el onanismo en las que caben jungle, electro, hip-hop y techno, pero nadie hoy día ofrece una fiesta mejor.

JM