Excelente música, desastrozo trato 2

Un apartado diferente es para el boliche en sí. Siendo de Rosario y al ser la primera vez que voy a Pachá me llamó mucho la atención la gente, estaba todo bien pero me hizo acordar un poco a los boliches de los pueblos o de secundaria, por la onda de la gente. Eso no implica que haya estado bueno o malo de por sí pero no era lo que me esperaba. Es más, en el fragor del baile conocí mucha gente copada, en serio.
Lo que es vergonzoso es el trato de los patovas, tanto en la puerta como dentro del boliche. En la entrada me palparon como si me vieran cara de terrorista, hasta me sacaron el paquete de cigarrillos y me lo abrieron para ver si había algo dentro que no fueran...cigarrillos!!!!. Yo no estoy acostumbrado a ese tipo de cosas cuando decido ir a bailar y disfrutar de un buen momento. Igualmente considerando que podría llegar a ser entendible que a la "entrada" te revisen porque se puede considerar parte del "derecho de admisión", lo que era inaceptable era ver como los mastodontes esos, durante toda la noche; y hasta en el medio de la pista; abordaban a los pibes de a dos o tres metiéndoles manos en los bolsillos con una violencia que nunca había visto. Los increpaban, les sacaban las cosas de los bolsillos, se las examinaban al milímetro con unas linternas y después, si todo estaba bien, se iban. Como seguir después de semejante intromisión a la privacidad de uno, cuand uno está pagando una entrada para ir a un lugar???!!!. Cualquiera se podía ver sometido a eso simplemente porque ellos pensaban que estaba en "alguna". Un desastre total!. Encima estaban con la palabra "Prevención" impresa en la espalda, como si cumplieran esa función. Nada que ver con el trato que hay en, por ejemplo, Bahrein. Cuando fui a ver a Huntemann el año pasado hasta nos preguntaban si estabamos bien cuando nos veían mareados o en alguna situación comprometida. Nunca pensé que iba a pasar todo eso. Pensándolo un poco no se si volvería a ese lugar, no por la gente sino por ese tipo de cosas.

Igualmente, para resumir, conocí gente copada y con buena onda. El estado general de la gente, dejando de lado algunas excepciones, era de cierta fraternidad (aunque por suerte no tuve que pasar por cosas feas como que me quieran robar), gran parte de la noche la música estuvo increíble. Las visuales eran penosas, parecían hechas en el 95 con esos efectos 3D desactualizados y esos colores que no te estimulan a nada. Las luces nada fuera de lo común y el sonido muy groso.

Más allá de todo esto, hay que pensar que es simplemente una fiesta, que el recuerdo de ella va a estar vívido durante un tiempo y después se va a tornar borroso pero lo que queda son las experiencias vividas con la gente que estaba alrededor, amigos nuevos, viejos y eventuales.

Un beso a todos. Espero nos encontremos en otro momento, :-)