En segundo lugar, tan solo decir que ya soy, para bien o para mal, treintañero, y que cuando Kraftwerk empezaba yo ya no solo disponia de independencia en lo que a higiene y residuos fisiológicos se refiere, sino que ya escuchaba música con un interés y una pasión que, afortunadamente, no me han abandonado. Asuntos que no recuerdo me impidieron verlos en directo en su actuación en la sala Pachá de Valencia (España), pero amigos mios sí lo hicieron y sus comentarios no hacen más que hacer más firme la sensación de que me perdí un concierto histórico para mi ciudad, y una oportunidad única para mi. Su magisterio en lo que a música electrónica se refiere es algo que creo ya dejé claro en su momento y no volveré a repetir algo que no entendió en su día solo el que no quiso.

Saludos y agradecimientos a todos aquellos que con su opinón hicieron la mía más rica y tolerante.