Un review al voleo de lo que fue la UMF día 2:
Llegué a las 21 hs e ingresé con un malón de gente sin ningún problema.
El predio estaba excelentemente distribuido, con muchas barras y cajas, gran cantidad de baños, puestos de merchandising, excelentes puestas en escena de los stages y la carpa techno y demás yerbas.
Cuando entré estaba tocando en el main Adrián de Bernardi y sorprendía la calidad del sonido del main stage.
A partir de ahí todo barranca abajo.
Fui derechito a ver a NINA KRAVIZ y la verdad es que me tendría que haber ido derechito a mi casa...
NINA KRAVIZ como dj es una hermosa modelo. Es técnicamente impresentable. No sabe trabajar con los potes, no sabe cuando subir o bajar el volumen, se la pasa quejándose de todo. Dos por tres le entra horrible a las mezclas. La selección de temas muy despareja y monótona. De verdad que es un espanto clavarse un set de ella.
No tenía pensado caminar demsasiado por el predio porque lo único que quería ver era la carpa techno y en particular Jeff Mills. Y de repente la peor notica: Jeff no pinchaba.
Y entre esa noticia y el bodrio de Nina, me dedique a hacer un estudio antropológico recorriendo los distintos stages.
Sólo para ratificar una vez más que el trance, o eso a lo que le llaman trance ahora, está cagado mal. IRRECUPERABLE.
Que desastre por el amor de satán. Un ruido a lata en todos los stages. Todos cortados por la misma tijera. Pasando los mismo tema o similares porque a decir verdad suenan todos iguales. Era la famosa batería electrónica. Pero batería de cocina a ver si nos entendemos. Vomitivo.
Muchachos del trance vuelvan a los orígenes por favor, claven un par de veces SASHA@GU Ibiza, Northen Exposure, Comunicate y PVD@Politics of dancing mínimo 1 y 2 y después de eso arranquen de nuevo.
Lo que están escuchando ahora no es trance, es jugo Tang. Música rebajada con agua de Riachuelo y revuelta en una gran cacerola de sonidos metálicos.
Luego de mi gran aventura por la selva del predio (podría haber cortado el pasto, no te pido que rellenes los pozos rompe piernas, pero al menos cortame el pasto hdp)vuelvo a la carpa techno a ver a ELIO RISO, quién nunca defrauda.
Y así fue nomás. Lo mejor que escuché en mi corta noche. Sin descollar como otras veces hizo un muy buen set, sosteniendo y marcando el ritmo. No mucho más que decir de un set de 7 puntos para arriba.
Seguimos con UMEK que no estuba mal pero tampoco era que me re divertía y eso sumado a una tormenta que empezó a caer tipo 130 hs y que hacía imposible por bailar dentro de la carpa dado la cantidad de gente que se metía para resguardarse de la lluvia, decidí darme media vuelta, correr al auto y volver a casa a ver The Big Bnag Theory.
Sinceramente nunca me pasó irme de un festival tan vacío de música como en este. Decepecionante. Música sin alma, sin espíritu. Un festival con mucho brillo, algo de glamour como no veía desde las viejas CF y las primeras SAMC, pero con pocas luces e ideas musicales nuevas por parte de los djs.

Por lo menos así lo viví y escuché yo:(