Mi novia es fanática de él desde hace años así que toque donde toque, cada vez que venga estoy obligado a ir (aunque voy muy a gusto porque siempre la paso bien cada vez que lo escucho).

El Lugar.
Guardarropas: pésima organización
Luces y ambientación: no son acordes a la música que pasan ahí.
Sonido: muy bajo y a partir de las 5 saturaban mucho los parlantes de atrás. Hay pocos parlantes para semejante lugar.
Seguridad: Muy cara de perro y bastante mal educados. No te devuelven ni siquiera el saludo. Es algo bastante de los 90 esa seguridad mala onda, deberían darse cuenta que poniendo gente más amigable en esos puestos haría que la gente valore de manera mucho más positiva el lugar.

WU: Muy bueno. Excelente música y mezclas, manejaron muy bien la ansiedad de la gente que esperaba que Sander empezara a las 2 y tocaron hasta las 3.30 hs. Y algo que me gustó es que no hicieron un Wu tan instenso como suelen hacer. Fue más que nada bien groovero y sin perder su identidad se acercaron a lo que venía.

Sander: Primeros tres temas bien arriba para que la ansiedad baje y queme un poco las piernas de los sacados. A partir de ahí, fue llevando a la gente con su característico house hipnótico (ahora devenido en tech house) para generar ese clima bien groovero y fiestero pero altamente hipnótico. Trajo la valija llena de música del verano reciente y nos llevó allá cuando hacía 0° en Bs As. Mezclas delicadas, música super fina pero fiestera. Fue el mejor ejemplo para explicar que no es necesario tirar pizzas para poner música fiestera y generar ese clima en una pista.
La última media hora, 45 minutos hace lo que hace siempre, tira temas que le gustan sin demasiada lógica. A veces le sale bien, otras no tanto. El otro día para mi no le salió tan bien pero es un detalle menor al lado de lo que hizo antes. Muy buen set y clima en la pista.